De recién nacido, el bebé se mete el dedo en la boca por el reflejo de succión, que desaparece hacia el segundo mes de vida. A los 3 meses ya se lleva el dedo y el puño a la boca voluntariamente y vuelve a chupárselos. A partir de los 5 meses recurre a esta práctica con todo lo que dejamos a su alcance, pues ya sabe agarrar bien los objetos. El pequeño, a esta edad, todavía no tiene bien desarrollado el sentido del gusto ni siente un hambre voraz que le lleve a intentar comérselo todo. Chupa las cosas por otras razones.
DATOS SORPRENDENTES:
1.- SOBRE EL DEDO: Gracias a las ecografías sabemos que el hábito de chuparse el dedo comienza en la semana 20 de gestación y que la succión se intensifica a partir de la semana 32 y cuando a la futura mamá le realizan pruebas que invaden el útero. También sabemos que los zurdos, en su etapa intrauterina, se chupan más el pulgar izquierdo.
2.- SOBRE EL CHUPETE: Según un reciente estudio realizado por una doctora en la Universidad de Virginia (Estados Unidos), la utilización del chupete para conciliar el sueño en niños menores de un año parece estar relacionada con la disminución del síndrome de muerte súbita del lactante, por lo que es incluso aconsejable.
Raquel (Nhey)
