* Si tiene el sueño cambiado (se desvela por la noche y se queda sormido al amanecer), mantenle más horas despierto durante el día (procura que le lleguen los sonidos de la casa, que vea la luz, dirígete a él muy a menudo…) y prolonga las tomas diurnas con juegos, masajes, paseos, canciones… De noche, dale las tomas en silencio y en penumbra y acuéstale en cuanto termine de comer.
* Si llora, no le consueles siempres dándole de comer. Es muy probable que esté incómodo por otra cosa (frío, calos, dolor de oídos o de tripa, sensación de soledad…) y si siempre le calmas de este modo, además de sobrealimentarle, te costará más conocerle y conseguir establecer una rutina con él.
* Si piensas salir de paseo justo después de darle la toma, acuéstale diractamente en el cochecito, no le eches primero en la cuna.
* Si se desierta cada vez que paras el cochecito, una opción es llévale en la mochila ventral. Así no interrumpirás su sueño y se sentirá más a gusto y tranquilo.
Raquel (Nhey)
